Tú ya eres muy profesional.
Estás utilizando los recursos, que utilizan los grandes profesionales, para educar a su perro a un
Lo único que te falta es un poco de técnica.
Por ejemplo: A la hora de jugar con tu perro, no estás utilizando todo el potencial del juego, nos obsesionamos en que tenemos que salir a jugar con la pelota o con el mordedor, pero nuestro cuerpo puede servir como juguete, a la hora de interactuar con nuestro perro a la hora de enseñarles algo.
Jugamos mucho en casa cuando nuestro perro es un cachorro con un objetivo, enseñarle a que no muerda el mobiliario, pero eso no es jugar o no debería de serlo, debería ser más una ayuda a superar esa fase de echar la dentadura que un juego.
El juego dentro de casa deberíamos evitarlo, ya que en casa queremos un perro tranquilo.
Puede ser que tampoco estés utilizando plenamente los halagos, cuando decimos muy bien, buen perro, buen chico, buena chica.
Cuando le decimos estas palabras solo se lo decimos la primera vez que lo hace bien y lo importante es dar esos halagos y buenas palabras siempre.
Cuantas más veces repita el comportamiento, más efusividad y más entusiasmo pondré yo en comunicar al perro que lo ha hecho bien.
Estas situaciones y estas técnicas las explico hoy, en nuestro episodio de podcast.
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